El grupo municipal de Izquierda Unida ha pedido, esta noche en la sesión plenaria durante el turno de ruegas y preguntas, responsabilidades al equipo de gobierno por no haberse acogido en el edificio de las Filipenses a un grupo de menores No Acompañados, los denominados centros MENA. La concejala, Reyes Estrada ha preguntado por quién decidió la apertura y luego cierre, al mismo tiempo ha manifestado que en un medio de comunicación la delegada de Igualdad de la Junta de Andalucía dice que “es el equipo de gobierno el que decidió que no”. El alcalde, Esteban Morales, ha aclarado que es la Junta de Andalucía la que tiene la competencia, “el ayuntamiento no lo ha pedido y nosotros lo que recibimos fue un anuncio”. También ha trasladado al plenario que Puente Genil “es un pueblo solidario”, ya que “acogemos al centro más grande de inmigrantes de España con Cruz Roja, tenemos un Centro de Reforma y tres zonas desfavorecidas con 3.000 o 4.000 personas al borde de la exclusión”. Esta información – apuntó- se la trasladaron a la Junta y “le pedimos que lo tuviera en cuenta”. Al mismo tiempo- ha continuado relatado el alcalde- “había una preocupación manifiesta por parte de los vecinos de Santo Domingo”. Una información de GRUPO COMUNICA (Infórmese de nuestros servicios INTERNET- TELEFONIA- TV, 957601002).
La edil, ha seguido intentando culpar al ayuntamiento de no querer acoger a estos menores, mientras que el regidor local le ha replicado que “Puente Genil está siendo solidaria, aquí no ha habido un brote de xenofobia, y hay una integración total”. Por lo que ha sentenciado, “ parece que todo lo demás es pura demagogia”.
El pasado 10 de octubre, la Consejería de Igualdad de la Junta de Andalucía decidió no abrir en Puente Genil el Centro de Menores Extranjeros No Acompañados, que estaba previsto que tutelaría la Fundación Internacional Aproni en el antiguo edificio de las religiosas Filipenses,.
Y es que los vecinos, en cuanto conocieron la noticia, manifestaron su malestar por la preocupación ante posibles casos de inseguridad ciudadana que podría provocar la ocupación del centro por parte de estos jóvenes.
El edificio, perteneciente a la congregación de las Madres Filipenses, está cerrado desde el año 2015 y situado en el barrio de Santo Domingo, en una zona relativamente de nueva construcción. El edificio está ubicado frente al IES Juan de la Cierva y del pabellón de deportes Alcalde Miguel Salas, muy frecuentado diariamente por niños y adolescentes. Algunos padres del IES también habían mostrado malestar.
