El Centro de Migraciones de Cruz Roja en Puente Genil dio ayer a conocer las actividades que organizarán en torno al próximo 20 de junio, fecha en la que se conmemora el Día Mundial del Refugiado. Una jornada que constituye una expresión de solidaridad con aquellas personas que han sido desarraigadas de sus hogares, bien por conflictos bélicos o por persecución. Según Rafael Sánchez, presidente de la Asamblea Local de Cruz Roja en Puente Genil, “no se trata de compartir una carga, sino una responsabilidad mundial”. La idea, según matizó, es “sensibilizar, concienciar y llamar la atención sobre la ciudadanía”. (HOY EN PUENTE GENIL NOTICIAS TV- 20.30.HORAS)
Lola Gálvez, concejala de Cooperación al Desarrollo, destacó la “labor encomiable” de Cruz Roja en la localidad, resaltando, además del asilo y apoyo que prestan, el trabajo que realizan “en pro de la integración social”. En este sentido, mostró el apoyo del Consistorio pontano, destacando la colaboración de la concejalía de Deportes en la organización de la I Carrera Nocturna “Millas Solidarias con los Refugiados”, el próximo 15 de junio a las 22.00 horas. Completan el programa de actividades, del 14 al 21 de junio: exposiciones, proyecciones de cine, actividades deportivas, actividades teatrales, conciertos y una jornada de puertas abiertas el 19 de junio.
Ángel Pérez, director de Cruz Roja Puente Genil, incidió en la visibilidad y la sensibilización con los refugiados, argumentando que “huimos del encapsulamiento” y que “no podemos vivir como si fuésemos un quiste en Puente Genil donde trabajamos 60 personas y vivimos 160”.
En la actualidad, el servicio de atención a inmigrantes y refugiados, que se presta desde el Centro de Migraciones de Cruz Roja en Puente Genil, tiene una ocupación de 136 personas sobre 160, “porcentaje alto- según Pérez- que estimamos que, con el buen tiempo , se eleve al 100 por cien de la ocupación”. De ellas, 83 plazas están destinadas a refugiados, con unos 6 meses aproximadamente de acogida. Las nacionalidades son muy variadas, desde Ucrania y Siria (por conflictos bélicos), hasta Costa de Marfil y Mali (en África) así como países de Sudamérica como Venezuela, Colombia, Honduras y El Salvador. “En definitiva, mochilas cargadas de sufrimiento por muy diferentes razones”, según informaron desde Cruz Roja.