El diputado andaluz de Adelante Andalucía por Córdoba, David Moscoso y nautural de Puente Genil baraja renunciar a su acta de parlamentario por no poder compatibilizar su actividad política con su trabajo como profesor universitario. La Comisión del Estatuto del Diputado ha rechazado esta posibilidad, una decisión insólita que se convierte en el primer caso registrado en la historia del Parlamento de Andalucía. La misma comisión acordó conceder la compatibilidad de sus actividades profesionales privadas a 16 de los 17 diputados que lo solicitaron.
El parlamentario, que lo fue también en la anterior legislatura como representante de Podemos, explica que decidió concurrir de nuevo a las elecciones autonómicas bajo la condición de que compatibilizaría el escaño con su trabajo en la Universidad y sólo cobraría el sueldo de docente. Por este motivo, avanza que no le quedará otra opción que dimitir si no se reconsidera esta decisión, que aún debe ser ratificada por el Pleno del Parlamento Andaluz. Sin embargo, los distintos grupos políticos ya han manifestado sus posturas en el seno de la comisión, de la que salió un dictamen negativo para Moscoso.
El diputado andaluz considera que ha sufrido un trato desigual por parte del Parlamento y denuncia «vulneración de derechos». Se apoya en que la comisión sí ha permitido compatibilizar sus cargos a otros parlamentarios con el mismo oficio, como el diputado de Ciudadanos, Francisco Carrillo. Además, Moscoso recuerda que él es un parlamentario raso, sin capacidad de acción de gobierno, lo que anula cualquier posible conflictividad de intereses. Más sangrante le resulta que el consejero de Educación, Javier Imbroda, pueda continuar «al mando de sus empresas privadas de formación profesional» cuando ostenta competencias en materia educativa.
