La lluvia no ha impedido que centenares de personas hayan secundado la Huelga Feminista que un grupo de mujeres ha convocado para esta tarde en la plaza de España de Puente Genil, encabezadas por una gran pancarta en la que se leía “si nosotras paramos, se para el mundo”. PODRAN VERLO EN GRUPO COMUNICA (Viernes, 20: 30 horas).
A golpe de cacerolada y con indumentaria morada se han hecho visibles . Dos mujeres han dado lectura a un manifiesto y denuncias por parte del colectivo. Entre otras cuestiones han reclamado “la identidad es múltiple, somos diversas. Vivimos en el entorno rural y en el entorno urbano, trabajamos en el ámbito laboral y en el de los cuidados”.
Han exigido que el “Pacto de Estado contra las violencias machistas –por lo demás insuficiente– se dote de recursos y medios para el desarrollo de políticas reales y efectivas que ayuden a conseguir una sociedad libre de violencias contra las mujeres y niñas.” Han denunciado que ” la LGTBIfobia social, institucional y laboral que sufrimos muchas de nosotras, es otra forma de violencia machista”.
Han informado que con “la huelga de cuidados en la familia y la sociedad, damos visibilidad a un trabajo que nadie quiere reconocer, ya sea en la casa, mal pagado o como economía sumergida. Reivindicamos que el trabajo de cuidados sea reconocido como un bien social de primer orden, y exigimos la redistribución de este tipo de tareas”.
La huelga laboral que muchas mujeres han secundado hoy, ha sido contra” los techos de cristal y la precariedad laboral, porque los trabajos a los que logramos acceder están marcados por la temporalidad, la incertidumbre, los bajos salarios y las jornadas parciales no deseadas”.
Entre aplausos las manifestantes han arropado los discursos, al tiempo que han reivindicado “no más pensiones de miseria”. Y han gritado fuerte “contra el neoliberalismo salvaje que se impone como pensamiento único a nivel mundial y que destroza nuestro planeta y nuestras vidas.”.
En líneas generales “exigimos ser protagonistas de nuestras vidas, de nuestra salud y de nuestros cuerpos, sin ningún tipo de presión estética. Nuestros cuerpos no son mercadería ni objeto, y por eso, también hacemos huelga de consumo. ¡Basta ya de ser utilizadas como reclamo!.