Más de 1.500 pacientes vulnerables se encuentran en seguimiento en la provincia para identificar problemas y poner en marcha actuaciones.
Los centros de la sanidad pública han atendido en Córdoba un total de 86 urgencias relacionadas con el calor y sus efectos desde que el 1 de junio se activó el Plan de Prevención de los Efectos de las Temperaturas Excesivas. De éstas, registradas hasta el 2 de agosto, 35 han sido por golpes de calor, mientras que otras 46 corresponden a otras patologías relacionadas con las altas temperaturas.
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Entre las asistencias por golpes de calor en la provincia, 21 se han producido en los servicios de atención primaria, 14 en las urgencias hospitalarias. En cuanto a las 46 atenciones a patologías relacionadas, 18 se han producido en atención primaria, 28 en hospitalaria y 5 por los servicios de emergencias sanitarias.
Por otra parte, se han contabilizado 86 alertas sanitarias en las ocho provincias andaluzas debido a las altas temperaturas, de las cuales 17 han correspondido al nivel amarillo, 29 al naranja y 40 al rojo. Concretamente en Córdoba se han registrado 9 días en alerta sanitaria, 4 de ellos en nivel rojo y 5 en amarillo.
Seguimiento de pacientes vulnerables
Un total de 13.042 pacientes están en seguimiento telefónico por la Consejería de Salud, de los que el 12% -1.513 pacientes- pertenecen a Córdoba, una de las medidas más importantes del Plan que activa la Junta desde 2004 para prevenir y minimizar las consecuencias que el calor y las altas temperaturas puedan tener sobre la salud de la población, y especialmente la más vulnerable. Concretamente, el seguimiento permite identificar las situaciones y problemas del paciente e interconectar a las enfermeras gestoras de casos, enfermeras de familia y profesionales de Salud Responde, así como poner en marcha los mecanismos de control y actuación necesarios para minimizar los efectos de las altas temperaturas.
Son los profesionales de los centros de Atención Primaria los que hacen esta labor continua de identificación de pacientes con mayor riesgo o mayor vulnerabilidad ante el calor. Es el caso de mayores de 65 años y pacientes frágiles que viven solos, cuyo estado de salud está debilitado por padecer alguna patología crónica de alta morbilidad (insuficiencia cardiaca, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, demencia, trastorno mental grave, insuficiencia renal, obesidad excesiva, hipertensión arterial o diabetes mellitus) o que tomen un medicamento que pueda influir en la adaptación del organismo al calor (psicotropos, antidepresivos, hipotensores y diuréticos). A ello se suma en muchos casos que estas personas no disponen de condiciones de habitabilidad adecuadas en sus viviendas para protegerse del calor.
Asimismo, a través de Salud Responde se lleva a cabo un seguimiento telefónico a este tipo de pacientes que, hasta el pasado domingo 6 de agosto, ha realizado en el conjunto del territorio andaluz un total de 13.042 llamadas, de las que el 15% se han efectuado en Córdoba, concretamente 1.926.